En estos nebulosos tiempos donde los referentes se mezclan y pierden, donde el top ten de las descargas por internet responde a richachonas histéricas promocionándose como kleenex, donde las britney spears del mundo enseñan el culo en tanga entre delirios melancohólicos, se exige un sincericidio que aniquile semejantes estampas y las deje arrinconadas en el anonimato que merecen.
Tal es logro (accidental) de una ilustre porquera de Badajoz, que arremete contra su pasado y se venga de su destino retirándose al pueblo y dedicándose a la cría de cerdos. Desde allí escribe con riqueza y humor casi sarnoso regocijándose en los placeres de su nueva y lograda vida:
"Lo cierto es que la naturaleza me ha dotado de unas ubres inmensas, y es que la naturaleza es sabia, a ver si no como iba a haber amamantado a esos 5 hijos de puta que tuve que parir con dolor y tremendo arrepentimiento. Que quererlos los quiero, porque son mis hijos y hasta los animales tienen ese sentimiento, pero los quiero lejos, bien es verdad. Pues salgo de paseo vestida de esa guisa, o más bien desvestida, enfundada en un sueter negro bien apretao, con un escote en uve vertiginoso, que casi se me pueden ver hasta las tripas, y una falda negra de tubo, para marcar bien las nalgas, y me voy hacia la iglesia del pueblo, a la hora que sé sale el cura a pasear y me pongo frente a él y lo miro con descaro y me contoneo. No falla, el párroco empieza a ponerse colorado y a bufar como un toro, trastabillea y cambia de acera, pero tarda lo suficiente para que yo tenga constancia de la "turbación" que le provoco en esa parte de su cuerpo que el señor se ha quedado en exclusiva. "
Pero ahí no queda todo, pues también el lector encontrará solaz y divertimento en los episodios que relatan, con enorme impudicia y talento, grotescos episodios de su vida pasada. Una gozada.
Tal es logro (accidental) de una ilustre porquera de Badajoz, que arremete contra su pasado y se venga de su destino retirándose al pueblo y dedicándose a la cría de cerdos. Desde allí escribe con riqueza y humor casi sarnoso regocijándose en los placeres de su nueva y lograda vida:
"Lo cierto es que la naturaleza me ha dotado de unas ubres inmensas, y es que la naturaleza es sabia, a ver si no como iba a haber amamantado a esos 5 hijos de puta que tuve que parir con dolor y tremendo arrepentimiento. Que quererlos los quiero, porque son mis hijos y hasta los animales tienen ese sentimiento, pero los quiero lejos, bien es verdad. Pues salgo de paseo vestida de esa guisa, o más bien desvestida, enfundada en un sueter negro bien apretao, con un escote en uve vertiginoso, que casi se me pueden ver hasta las tripas, y una falda negra de tubo, para marcar bien las nalgas, y me voy hacia la iglesia del pueblo, a la hora que sé sale el cura a pasear y me pongo frente a él y lo miro con descaro y me contoneo. No falla, el párroco empieza a ponerse colorado y a bufar como un toro, trastabillea y cambia de acera, pero tarda lo suficiente para que yo tenga constancia de la "turbación" que le provoco en esa parte de su cuerpo que el señor se ha quedado en exclusiva. "
Pero ahí no queda todo, pues también el lector encontrará solaz y divertimento en los episodios que relatan, con enorme impudicia y talento, grotescos episodios de su vida pasada. Una gozada.
Es una mujer en pleno dominio de sus facultades, de su cuerpo y por supuesto de su talento. Es para nosotros otro ejemplo contra la dictadura imperante de las esmirriadas.
No es nuestro prototipo de belleza, ni falta que hace que lo sea
ES MUJER Y GUSTA DE SERLO!!NO MÁS ESQUELETOS POR FAVOR
3 comentarios:
estos están en la parra...
visítela en
www.laporquera.blogspot.com
pero que me encuentro?? Esto no me lo esperaba. Una mujer en la plena madurez, retirada ami tranquila, pero no por ello aburrida, vida. Que enorme alegría encontrarme este post dedicado. Me ruboriza tanto halago, la verdad sea dicha. He estado algo retirada y ocupada en otros menesteres, pero prometo volver en breve a contar mis experiencias que espero os alegren e ilustren. Muchas gracias y muchos besos
Un placer
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